En algun lugar del tiempo en ocasiones la vida no nos deja controlar y nos sentimos culpables por pensar que debimos hacer mas, que pudimos obrar pero no hicimos, y es que la vida es caprichosa, dura, de dificil transito, no hay manual escrito que nos evite sorpresas terribles y peligros, la vida nos da portazos inesperados y nos deja solos con el error del remordimiento, con la locura del vacio que nos queda.
En algun lugar del tiempo la vida nos despista por sus contrastes y al transitar por ella, luchamos en medio de una aventura en la cual encontramos empinadas cuestas que subir y, en otras ocasiones, senderos de paz en donde reposar nuestro agotado corazon.
En algun lugar del tiempo lloramos desconsolados por las ausencias de nuestras estrellas del pasado, lloramos porque creimos que pudimos evitar lo que el destino absurdo, caprichoso, nunca escrito pero presente, nos tiene reservados a todos.
En algun lugar del tiempo sentimos que la suerte nos es esquiva e intentamos mirar al cielo deseando ver la estrella que se apago y en medio de las lagrimas a veces no percibimos que nuevas estrellas comienzan a guiñar sus ojos ofreciendonos una nueva oportunidad. En el tiempo, en el silencio de las ausencias, nuevas compañias llegaran a nuestros corazones, seran estrellas nuevas que nos devolveran la ilusion por vivir.
En algun lugar del tiempo descubres que existen los milagros por fugaces que estos sean y la noche, antes oscura y tenebrosa, se ilumina con la suavidad de la luz de la luna y con el parpadeo de miles de estrellas que caminaran con nosotros para siempre, mientras dure su brillo y nos acompañen en algun lugar del tiempo.
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Gracias Vicent,por tus palabras y por la poesia,todo lo bello tiene sentido,y las mejores poesias salen siempre desde lo mas profundo de uno mismo....aunque a veces no este si lo necesitas dejame un mensaje,aunque sea para estar unos minutos,para tener una palabra de aliento,para escuchar,no se si te acordaras pero yo me meti en esto para ayudar a una amiga,y bueno para apoyar y apoyarme,he leido mucho,intento aprender,entender,hay casos terribles,pero quiero quedarme con lo positivo,y de lo que leo quiero quedarme con palabras,palabras como constancia,esperanza,ilusion,comprension,paciencia,tu Vicent estas haciendo las cosas bien y eso tarde o temprano tiene que dar sus frutos,no tengas miedo de apoyarte en mi,en nosotros cuando lo necesites...no renuncies a nada..tenemos un cafe pendiente,un abrazo Vicent.
Hola Miguel. Hacía tiempo que no sabía de ti y me alegro de volver a leerte. Aunque quizás el motivo es mío porque acabo de salir de nuevo de una crisis. Como bien dices el Tiempo y la Vida no nos deja controlar los acontecimientos que nos toca pasar quizás porque si todo fuera previsible ya no habitaríamos en este plano de existencia ni siquiera en este planeta Tierra tan amado-odiado ni en este cuerpo. Esto es lo que, a pesar incluso de lo que yo preferiría también sufro cada día, cada hora y minuto y segundo de mi existencia, la eterna ley del Libre Albedrío y de la inmanencia, el tener que elegir y con cada elección la responsabilidad que ello conlleva y que me conduce a un lugar u otro totalmente diferente con las consecuencias diferentes y los lugares distintos con escenarios completamente desiguales. Y así eternamente, sin ninguna seguridad, sin manuales, con esas dificultades del tránsito terrenal que tú comentas, con el pánico que me provoca el no tener “manual” por haber nacido sin él y, yo añadiría, sin planos para manejarme por la vida y además sin ruta fija para saber a dónde voy y sin saber por qué voy y para qué. Todo un reto que debo afrontar con unos miedos terribles que me inundan esta gran locura, mi gran locura del Vacío.
Intentaba no pasar por el tamiz de mi razón esas hermosas palabras tuyas al referirte a las lágrimas derramadas por las estrellas perdidas y que suelen ocultar la belleza de las nuevas estrellas, de los milagros fugaces que se dan obviamente, porque es cierto, y me cuesta. En mi caso, la razón se convierte en demasiadas ocasiones en mi gran enemiga porque intento “comprenderlo” todo, razonar lo que no tiene lógica pero puede tener sentido desde la emoción pura y dura si se pierde el miedo a vivirlo en ese estado puro y uno se deja llevar a esos valles donde desaparece la lógica y se deja inundar por los sentidos más primitivos y solamente siente, amor, pasión, felicidad, dolor, angustia, pena, rabia, ira, alegría, tristeza… sin huir, sin poseer, sin poner límite, simplemente observar, sin más. A veces, cuando la vida no me pesa demasiado y me he atrevido a hacerlo, la experiencia ha sido genial; tampoco voy a valorar ahora el por qué de mi inconstancia.
Me gustaría terminar este diálogo contigo con un poema de Gil de Biedma. Es una poesía que me ha venido a la mente mientras te leía, no sé porqué, y como no quiero entrar a razonar conmigo mismo, simplemente te la escribo; tampoco voy a pensar demasiado si tienen mucho o poco sentido, sencillamente la voy a escribir, así si tú le encuentras mucho sentido será genial y si no, será un poema, siempre estupendo. Oye, que muchas gracias por tu escrito, me ha gustado muchísimo y me ha ayudado mogollón esta mañana que empieza con visita de control en psiquiatría aunque ya me encuentro mucho mejor. Espero que todo te vaya muy bien y desearte una buena semana. Como no emplazarte a tomar un café, eso siempre sienta mejor. Un cordial abrazo… con poesía:
Aunque sea un instante, deseamos
descansar. Soñamos con dejarnos.
No sé, pero en cualquier lugar
con tal de que la vida deponga sus espinas.
Un instante, tal vez. Y nos volvemos
atrás, hacia el pasado engañoso cerrándose
sobre el mismo temor actual, que día a día
entonces también conocimos.
Se olvida
pronto, se olvida el sudor tantas noches,
la nerviosa ansiedad que amarga el mejor logro
llevándonos a él de antemano rendidos
sin más que ese vacío de llegar,
la indiferencia extraña de lo que ya está hecho.
Así que a cada vez que este temor
el eterno temor que tiene nuestro rostro
nos asalta, gritamos invocando el pasado
-invocando un pasado que jamás existió-
para creer al menos que de verdad vivimos
y que la vida es más que esta pausa inmensa,
vertiginosa,
cuando la propia vocación, aquello
sobre lo cual fundamos un día nuestro ser,
el nombre que le dimos a nuestra dignidad
vemos que no era más
que un desolador deseo de esconderse.
Chindasvinto, una sensación fea y bonita al mismo tiempo, indica que tu deseo es hacer aquello que quieres.
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