La actual crisis económica se ha instalado en nuestras vidas, es tema de conversación recurrente, las noticias en los medios de comunicación no ayudan a generar confianza y en todas las casas hay quien, si no ha perdido ya el trabajo, teme por éste, pues la empresa donde trabaja está sufriendo los efectos de la crisis.
Nos vamos dando cuenta de que el nivel de vida de hace unos años ya no volverá, y que si por casualidad o interés nos vuelven a vender " cantos de sirena “, recordaremos aquello de que no hay duros a cuatro pesetas.
Esta crisis general, como cualquier otra particular, nos confronta a nosotros mismos, nos obliga a pensar, a reflexionar sobre las prioridades, los deseos, las necesidades reales y los valores propios y sociales. Nos pide en definitiva, sacar lo mejor de nosotros para atravesar el temporal y reencontrar mares más benévolos.
Habrá que buscar respuestas tanto fuera como dentro de uno mismo. Siempre hay un margen de maniobra, a condición de saber diferenciar dónde termina la responsabilidad de los demás (gobiernos, mercados, etc...) y donde comienza la propia, pues las iniciativas y los cambios que tendremos que emprender para mejorar la situación, siempre nacen en el reconocimiento de la propia responsabilidad.
No encuentro mejor manera de ilustrar esta reflexión que con la letra de la habanera " El Capitán”. Dice así:
“Qué sencillo ser Capitán cuando el viento sopla de popa, cuando no hay escollos a tocar, cuando la pesca es generosa. Qué sencillo ser capitán bajo estrellas y en cubierta, navegando en mar abierto con la luna a nuestro lado...
Cuando el faro no sea guía porque no quieren los Dioses, cuando la ola rompa encima, cuando te cueste estar de pie. Cuando el mar brame celoso y tiemble todo el casco. Cuando la fuerza sea escasa. Entonces sabrás qué traza se necesita para ser un buen Capitán.”
Si aún no lo hemos perdido todo o casi todo, como le ha pasado a mucha gente, y nos quedan fuerzas para estar de pie, no nos dejemos llevar por el miedo y la angustia, no perdamos el gobierno esperando que el tiempo amaine. Decidamos un cambio de rumbo si hace falta, cojamos fuerte el timón y ejerzamos de capitanes de nuestras vidas, tal como lo hemos hecho tantas otras veces.
Ramon Torra Martí
Psicólogo Especialista en Psicología Clínica
Col . N . 7244
Bienvenid@ a
La Comunidad de Sin-Límite
© 2024 Creado por Fundación TLP. Tecnología de
¡Necesitas ser un miembro de La Comunidad de Sin-Límite para añadir comentarios!
Participar en La Comunidad de Sin-Límite