Pongámonos al día.

Es 24 de Enero, llevo semanas sin entrar al foro. Han pasado mil cosas desde que, por algún motivo, llámese pereza o llámese no tener cosas que contar no entraba aquí. Pero echaba de menos leeros y que me leyeran, así que "Candice" ha vuelto.

Hay cosas que siguen igual que cuando me fui, como mi búsqueda del psicólogo que esté dispuesto a ayudarme. Encontré uno, pero lo único que hizo fue afirmarme que tenía TLP, decir que él no me podía ayudar y no volver a contactar conmigo. Duele bastante que te digan algo así, quiero decir, ¿El primer día ya me rechazas? ¿Es más, puedes rechazarme? En fin, espero que sepas que no te recomendaré a ningún amigo.

Aprendí a controlar muchos de mis arranques, pero sigo sin tener control sobre mi ira. Se está desbordando. Creo que si estando en un mal día me soltarán en un ring de la WWE, tardaría cinco minutos de reloj en llevarme el cinturón dorado. Pero no todo es tan fácil como mágicamente aparecer ahí, no puedo ir destrozando cosas a mi paso o golpeando a gente aunque sea mi primer impulso la mayoría del tiempo. Y sobretodo, no puedo herirme a mí misma ahora que llevo meses sin hacerlo, tirar tanto esfuerzo por la borda ahora sería ridículo.

Fuera de esto, conseguí ver después de meses a la persona a la que tuve que dejar hasta que controlara mi TLP y pudiera tener un poco de libre albedrío en mi casa. Fue perfecto, en serio. Fui feliz durante todo el día, y mira que eso llega a ser difícil. Luego me di cuenta de que ni he aprendido a controlar la necesidad de cariño las 24 horas del día, ni mis celos, ni mi autoestima y se torcieron las cosas. Ya ha pasado una semana desde aquello y no sé si mi inseguridad está yendo a más o es simplemente sugestión. No quiero ser posesiva, pero necesito saber que no van a dejarme, y viendo que cualquier chica es más lista, más guapa, más todo que yo, no soy capaz. Mi autoestima está por los suelos, le cojo manía a gente que no tiene culpa de nada, me siento celosa a la mínima y, eso me está haciendo daño. Me estoy haciendo mucho daño.

Ya que no estoy cumpliendo mi propósito de hacer deporte este año, espero que al menos, con esfuerzo, pueda cumplir mi propósito de conocerme a mí misma, quererme, comprenderme y levantarme cuando me caiga.

Y qué carajo, a hacer ejercicio también.