En mi terapia el trabajo es hablar de lo que deseo, del dolor, llorar, gritar, despotricar contra el mundo, decir malas palabras, en resumidas cuentas soltar todo lo que traigo dentro, vomito emociones.
Y cuando hablo y regreso al pasado, todo lo vuelvo a experimentar vívidamente y alguna emoción acompañará el diálogo.
Hoy iba hacia mi casa e iba charlando con mi madre, le hablé de las cosas por las que había pasado de niña, a cada cosa le ponía un pero, hasta que me dijo…
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