Hola a todos. He entrado a este foro luego de dos meses de salir de una relación con un hombre que padece TLP. MI intento por comprender mejor esta enfermedad me ha llevado a páginas como esta, he leído varios artículos y varios de los testimonios de ex parejas de gente que tiene este trastorno, y como una forma de sanarme y entender qué sucedió, quiero dar el mio.
Primero debo decir que muchas de las parejas de las personas con TLP llevamos con nosotros ciertas características que nos hacen afines a este tipo de personas, y que a veces estas características pueden coincidir con otro tipo de trastorno, como es el trastorno dependiente de la personalidad, o incluso el trastorno narcisista, como he leído y lo he sentido. No es que esto suceda siempre ni que sea una especie de regla, en realidad la clasificación de los trastornos de personalidad trata de agrupar a las personas según una serie de características que le definen en sus dificultades para sociabilizar y relacionarse, pero hay que comprender que en el mundo de la psiquis este tipo de estructuración puede dejar de lado muchas facetas complejas de las personas, que cada persona es única, y que este tipo de clasificación está diseñada para el manejo de estos individuos en el campo de la psicología o la psiquiatría, que son ciencias estructuradas , que intentan abarcar algo tan basto como es la naturaleza humana, a veces incomprensible e inaprensible.
En fin, a pesar de todo, entender este tipo de trastorno según ha sido clasificado me ha ayudado mucho para emprender mi proceso de perdón y de sanación. Entender el comportamiento de mi ex novio ahora, comprendiéndolo como un trastorno de la personalidad me libera de juzgarlo y guardarle rencor, de manera que me ayuda a romper todo vínculo que tenga con él, pues a veces, a falta de amor, desarrollamos vínculos más fuertes basados en el conflicto y el trauma.
Mi historia no es fácil. Yo misma creía que tenía y tengo alguna especie de trastorno de la personalidad, incluso hace 10 años yo compartía muchos de los "síntomas" que se le atribuyen al TLP, excepto el de la agresividad, he sido generalmente muy sumisa y poco asertiva. Sin embargo con el paso de los años, cambié, no sé si la madurez tiene que ver algo con esto, pero ya no soy esa persona de antes. Sufrí anorexia, bulimia, me automutilaba también y abusaba del alcohol y de las drogas prescritas, pero mi relaciones con mis ex parejas fueron de dependencia afectiva de una manera sumisa. Al menos eso quiero pensar.
La verdad es que había conocido a mucha gente hasta ahora, he tenido relaciones afectivas con gente que se ha comportado de forma manipuladora, egoísta, agresiva, obsesiva, amargada, y yo mismo me he comportado así muchas veces, sin embargo, el tipo de comportamiento que pude notar en mi ex novio fue algo que me llamó la atención desde el primer momento. Es como si hubiera una línea o un límite, que define hasta dónde las manipulaciones, las obsesiones y el comportamiento egoísta son expresiones "normales" de una persona y hasta dónde no lo son.
¿Pero qué es normal? Fuera de definir a lo normal como algo bueno o algo malo, yo apelo a definirlo como algo que se sale de la norma, algo que no es lo común.
Y en esto, el primer rasgo que saltó a la luz para mí, fue la conexión que esta persona tenia con la realidad. Creo que este aspecto es uno de los que nos conecta y nos relaciona entre nosotros, el compartir con los otros gran parte de nuestra percepción de la realidad hace que compartamos las mismas normas de relacionarse y socializar. Si bien todos somos diferentes y nuestra percepción de la realidad es única, compartir muchos de los aspectos de esta entre un grupo de personas es lo que conforma, a mi parecer una comunidad. De aquí creo que brota lo "anormal" de los indviduos que sufren trastornos de personalidad, pues ellos no ven la realidad como el resto de la gente, y su actuar puede resultar muy raro para su comunidad.
En general, mi ex, era una persona que parecía vivir en otro mundo. Al comienzo de la relación me costaba entender esto, pues su comportamiento se me hacía tierno e infantil, pero desde el inicio sentía que algo no encajaba, que sus reacciones a veces estaban muy distorsionadas con lo que en realidad sucedía. A veces incluso veía como se esforzaba por mostrar un comportamiento a fin a cierto acontecimiento. Durante la relación murió un familiar suyo, y recuerdo ver esta reacción. Intentó consolar a su madre, pero el no se inmutó realmente, su comportamiento era como el de un robot, incluso a veces creo que hasta su forma de caminar o interactuar con los otros era mecánica, como el resultado de un guión, como si se hubiese aprendido de memoria las formas y los gestos, y los repitiera una y otra vez, no de una manera histrionica, si no que se esforzaba mucho para expresar sentimientos de amistad, de cariño, de comprensión y empatía con los otros. Muchas veces copiaba frases que le decían o usaba frases de cajón para situaciones dolorosas, que a la mayoría de gente le conmueven de verdad.
En un inicio este comportamiento me deslumbró, en general su amabilidad y su aparente don de gente estaba tan estudiado y bien manejado en su actuar, que creía que había dado con una persona muy comprensiva, alguien buena, incluso hay allegados que lo consideraban un ser de luz. Su sonrisa y su forma de mirar, sus ademanes al hablar, eran como los de un niño de 12 años que había sido educado para comportarse bien, para seguir todos los guiones de etiqueta y ética. En fin, era alguien que había desarrollado un carisma.
Ahora, yo no veo que el se haya comportado así para manejar una fachada, no lo hacía de una manera hipócrita, el había aprendido y desarrollado este comportamiento a la falta, es como si una parte de su personalidad no estuviera consigo, y el desarrolló este comportamiento para adecuarse a la comunidad, para esconder o llenar una parte suya ausente. Las personas hipócritas en general, se comportan así en base a un compromiso, se comportan así en búsqueda de un objetivo más inmediato, sin embargo mi ex al comportarse así era como un niño que recitara de manera impecable un poema que no entiende. No sé si me explico.
Esa fue mi primera impresión, alguien demasiado bueno para ser real. Recuerdo que lo primero que dije de él al llegar de nuestra primera cita fue: es perfecto pero no sé. Poco a poco comencé a conocerle más.
He de decir, que una vez que esta persona se relaja, una vez que toma confianza su personalidad cambia súbitamente. Este cambio es sin dudar el primer y gran trauma en la relación. Había tenido otras relaciones con hombres que fueron agresivos y manipuladores, sin embargo ellos en un comienzo se mostraron tal cual eran, de alguna u otra forma su comportamiento develado con el tiempo no disto mucho del que uno pudo conocer al inicio. Pero con esta persona el comportamiento tenía un cambio radical, que comprometía especialmente su relación conmigo. Era ver a una persona que consideré tan comprensiva, amorosa y cuidadosa, como alguien cruel, sádico y frío. Eso que se denomina disonancia cognitiva es una de las mayores luchas para las parejas de las personas que sufren TLP. También una de las mayores causas de ansiedad y decepción.
La disonancia cognitiva es la que no nos permite ver las mentiras, los engaños, las frases crueles, las agresiones sutiles, y el gozo que estas personas suelen tener al hacer daño a alguien, simplemente las parejas de los individuos con TLP no pueden creer que eso que se les está mostrando sea cierto.
Empezamos a creer que es un error de percepción nuestra. Valga decir que muchos de los compañeros sentimentales de estas personas sufren de inseguridad y baja autoestima, por lo cual es muy comun que pongamos en duda nuestras propias percepciones de la realidad. Algo muy peligroso pues luego de una relación larga, podemos llegar a perder nuestros propios limites personales, así como nuestro propio sentido de aquello que está bien o mal, algo que puede llevarnos a la locura, la depresión y la ansiedad crónica, ademas de sufrir de una constante inseguridad para con nosotros mismos y los que nos rodean. He de decir que meses luego de terminar la relación empecé a sentir una especie de paranoia, a desconfiar de mis propios familiares y amigos y claro, de mi misma.
Una de las pistas que tuve y que creo que es crucial para detectar a personas de este tipo es el hecho de que con el tiempo una se da cuenta de que a pesar de haber convivido meses o años con ellos, ellos no conocen quien una es. Pueden saber mucho acerca de nuestras debilidades y de nuestro pasado, y ser intuitivos respecto de nuestros sentimientos, pero en sí mismo, ellos no son capaces de vernos como otra persona individual, no nos ven de una manera completa con nuestro carácter.
Es a pesar de la cercanía emocional y sexual, una relación superficial, pues el otro a penas intuye quienes somos. Sus regalos por ejemplo, eran regalos típicos, incluso con el pasar del tiempo, rosas, chocolates, perfumes, cosas por estilo, pero nunca habían regalos que tengan que ver con lo que uno hace , es y le gusta, con los intereses propios, es como si para ellos la relación fuera siempre la relación idílica que aprendieron viendo en las telenovelas o las películas.
Un dia le pregunté qué era lo que le gustaba de mí?, porqué estaba conmigo? no me supo responder, y esto es crucial, pues he visto análisis y comentarios acerca de las personas con este trastorno o que son catalogadas así, y de manera indulgente se dice que son del tipo mujeriego. Sin embargo, los mujeriegos, en general se mueven en base a su ego, llegan muchas veces a conocer a la otra persona, y a enamorarse, pero su búsqueda se basa en acumular mujeres y conquistarlas para sentirse mejor con ellos mismos y tener poder sobre otras personas.
Las personas con este trastorno no se mueven en base al ego, al menos mi ex, ellos realmente buscan llenarse emocionalmente de la otra persona, sus conquistas se basan en querer gustar y agradar y sentirse aceptados, o por otro lado sus conquistas terminan siendo íntimas sexualmente como si el encuentro sexual les proveyera un combustible especial, ellos forman realmente lasos con las personas con quienes mantienen estos encuentros, lasos de drenaje emocional. Es el caso de mi ex, quien a pesar de tener muchas parejas sexuales, no es alguien que presuma realmente de eso, pues no lo hace para buscar una superioridad social entre su grupo de amigos, sus encuentros eran muy secretos, y compartía con algunas personas vínculos sexuales de años sin que nadie sepa nada.
En este sentido, esta persona era seductora a más no poder. Poco le importaba cómo sea la otra persona, en tanto esta le pueda dotar de afecto y gusto. Miran para ser mirados, Notaba en su mirada la actitud de : mírame mirarte. No formaba relaciones en las que el manipule a la otra persona desapareciendo intencionalmente para aumentar el deseo en ella, no manejaba a las personas de esa manera intencional, sin embargo si desaparecía, pero cuando lo hacía, lo hacia de verdad, el cuando desaparecía era porque tenía otras citas, tenía otros encuentros, porque simplemente estaba aburrido, o para vengarse de alguna actitud que el la tomó como cruel.
Se puede entonces decir que estas personas no se mueven en base al ego, si no a las emociones, que en ellos son muy intensas; variando en períodos de tiempo muy cortos. En un día pueden sentirse realmente felices con alguien, decirlo, expresar lo enamorados que están, y en horas, pueden desaparecer por aburrimiento, o porque por un impulso se citaron con otra persona ese día.
Esa diferencia es clave para diferenciar entre un mujeriego común, y un hombre con este trastorno, pues veo que muchas mujeres generalizan en este aspecto. Entiendo que es un poco confuso.
Otro aspecto importante es la dificultad que tienen para el razonamiento deductivo. A veces son incapaces de seguir una serie de eventos y ver las consecuencias, es como si no tuvieran noción de la ley de causa y efecto en especial en términos bajo los cuales las personas a su alrededor reaccionan a su comportamiento. Ellos muchas veces parten de una emoción muy fuerte a través de la cual dan con causas inexistentes y con acusaciones falsas. Este aspecto era uno de los principales motivos de las peleas fuertes, pues era imposible dialogar en base a una indagación de los hechos. El diálogo siempre giraba alrededor de los sentimientos y emociones que él tenía, y bajo los cuales podía justificar cualquier conducta que estos sentimientos y emociones en ellos genere."tu provocas que me enoje" "te engañé porque te enojaste conmigo y heriste mis sentimientos"
Esto no solo sucedía conmigo, si no con su entorno, sus peleas familiares y con sus amistades, muchas veces se generaban porque el reaccionaba de una manera "irracional" a situaciones que no lo merecían. Un comentario mal entendido, o incluso un acto de ayuda hacia él podía generar en él mucha furia. Muchas veces tuve que sacarlo de peleas en situaciones sociales, en especial donde reinaba el alcohol y su máscara amable se caía, en las cuales las personas presentes simplemente no entendían el porqué de su reacción. Obviamente estas personas hacían responsable al alcohol de esa conducta, cuando en realidad el alcohol no hacía más que develar su emociones reales y des-inhibirlo en el contraataque. Como es obvio, conmigo pasado unos meses ya no se inhibía y sin alcohol, pude ser testigo de sobresaltos de ira, muchos de los cuales ni siquiera aún ahora sé ni entiendo la causa específica, es decir, qué fue lo que dije, o qué hice.
En estos ataques el me agredía, ya sea verbalmente o físicamente. Sus agresiones verbales llegaron a ser muy fuertes y de una sutileza y una crueldad que no había visto en otra persona. Más sus agresiones físicas no llegaron a mayores, comenzaban a crecer en intensidad, de sacudones a empujones, o a codazos, como las agresiones de un niño.
En realidad para ahora veo que el es como niño. Tiene la capacidad emocional de alguien de 8 años. Su capacidad de entender y comprender al otro es la de un niño de esa edad, y también su capacidad de amar y de depender. Es como un niño en busca de afecto, ególatra como todo infante, manipulador, pero en el fondo con el buen corazón de un niño. Yo lo veo así hasta ahora. Mentiroso también, podía mentir de una manera tan pueril como sofisticada. Mentía para revertir la culpa en mí, y mentía hasta por cosas que ni siquiera tenía que hacerlo. No es capaz de ver una relación afectiva de uno a uno. Simplemente no está eso en sus capacidades afectivas. Sus relaciones amorosas giran en torno a él, ya sea para dedicarle el tiempo y los sentimientos, como para que la relación sea el espacio en el cual el se exhibe y es admirado y querido por su representación.
No hablaré de su infancia, solo diré que fue muy dura y que sufrió negligencia de ambos padres.
Decidí separarme luego de meses de intensa ansiedad, y de sentir constantemente una incertidumbre estando con él. El no me conoció, pues como dije, no está en sus capacidades, sin embargo, en un punto era imposible darme más a conocer, porque a pesar de la intimidad y la entrega sexual y emocional, yo ya no podía traspasar la barrera de su personalidad. Esto creo que solo puede entenderlo alguien que ha estado con este tipo de personas. Las últimas peleas fueron horribles, y él sacó su peor lado, fue cruel y sádico.
Para la gente que esta pasando por esto, pues podría decir que lo que me funcionó fue el contacto cero. Es muy difícil hacer esto, pues la relación que se forma es algo maternal, al menos como yo la entiendo. Uno siente que le hace daño a un ser indefenso, a un ser triste y por el que una entregó todo. Yo no he amado de esta forma a nadie, y le agradezco por enseñarme esa entrega, pero en el camino yo sentía que si no me apartaba de esta situación, me iba a morir del dolor y de la ansiedad.
Creo que estas personas llegan a la vida para enseñarnos del amor propio y del amor en sí mismo. No creo que hay que odiarlas, y de ninguna manera el contacto cero implica eso, de hecho creo que si yo no le amara, siguiera con él. El contacto cero es necesario para la recuperación. Supongo que hay personalidades que se lleven mejor con individuos con este trastorno, sin embargo considero que estas personas hasta que no sean conscientes de su problema no deberían formar más relaciones afectivas que las que tienen. Al igual que considero que las ex parejas no deberíamos hacerlo hasta estar en condiciones adecuadas, pues como dije también sufrimos de un tipo de trastorno que nos hizo formar la relación con los tlp, y no es raro que en nuestra vida nos sigamos encontrando con personas así, o que incluso asimilemos ese comportamiento de alguna manera. Esto último a veces creo que me ha sucedido, por como he reaccionado a algunos eventos, por una agresividad repentina que ha nacido de mí un par de veces estos meses, y por una constante desconfianza en la gente, que antes no tenía.
En fin, es lo poco de todo lo que pasé que puedo decir. No sé si alguien lea esto, pero espero que le sea útil.
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Hola, te estoy leyendo con mucho interés porque veo que has dedicado un amplio espacio a describir a la persona con la que estuviste, y la verdad encuentro muy interesante tu punto de vista. He leido en varios sitios que en las personas con TLP hay un niño que no crece, un lado infantil, que por desgracia es algo traumático. En esto coincides realmente con otras percepciones. me pafrece muy interesante eso que dices de nuestra capacidad de compartir entre personas el mismo código y apuntas hacia las distorsiones... Tienen un lado mágico y artístico... Cuando ves alguien cuya mente está al servicio de unas paranopias, fantasías persecutorias o las que sean, sorprende la mente con sus ideas. Finalmente, claro, es malo no ajustarse a la realidad. Yo lo comparo con una planta, por ejemplo. Esta tiene que tener su tierra y abono y el sol... No es positivo desvincularse del entorno en exceso, cosa que las drogas hacen... por ejemplo...
si, gracias a ti lauri por leerlo, si es interesante saber el otro punto de vista, y si, las enfermedades mentales o algunos padecimientos emocionales algunas veces parecen traer una especie de lucidez creo yo
lauri dijo:
Gracias...
Hola aran, gracias por leerme y dar tu testimonio. Me ayuda mucho, la verdad si hubiese sabido más acerca de este trastorno las cosas hubiesen sido diferentes, yo empecé a dejar de tomarme de forma personal sus agresiones luego de que pasó mucho tiempo.. ahora, a partir de entender mejor a las personas con este trastorno, sus palabras ya no me duelen, y en realidad ha sido como abrir mis ojos, develar algo.
A penas me imagino por lo que debes pasar, como cuentas, pero por cómo va tu familia y tu vida, a pesar de que dices no ser feliz, parece que no lo haces mal.
No te sientas culpable, las enfermedades emocionales suelen ser tan duras como las físicas, puede que tengas un techo y comida, pero tienes esta condición, y parte de aceptarla es aceptar que no estás en este momento en las mismas capacidades que otras personas.. Un abrazo
aran dijo:
gracias por compartir tu experiencia....
Te voy a explicar un poco como funciono yo.... En un segundo podemos pasar por todos los estados, felices, tristes, con ira, enfadados, otra vez bien... en mi no lo puedo manejar....
Cuando alguien hace algo que me daña puedo odiarla, quererla, otra vez odiarla, sentir rabia, pena... así una y otra vez y tampoco lo puedo manejar...
por dentro tengo miles de pensamientos por minuto que me atormentan, quiero no pensar y para no hacerlo bebía mucho y eso me atontaba y por lo menos ya no pensaba....
Siempre que he hecho daño creo que no lo he hecho queriendo, pero a veces dudo porque sale una parte mala que me descoloca y luego me siento muy culpable y me castigo...
Como estoy siempre cansada mi deseo es que mi marido sepa lo que quiero, haga planes, haga más en casa etc... me cuesta mucho ponerme en su lugar y ver que el trabaja muchas horas...
Quiero ser buena madre y no falto el respeto ni pego pero me aíslo y distancio mucho.... una parte de mi me dice que soy una gran madre y otra no... no lo sé...
Soy la mejor amiga, siempre estoy para ayudar, escuchar... pero si esa amiga me hace algo que me duele ataco hasta situaciones que me desbordan y luego me siento mal pero vuelvo y vuelvo a atacar y no me gusta....
No suelo saber que emoción vivo en muchas ocasiones, me preguntan.. como estas ahora mismo y siempre digo tranquila... es algo que he aprendido y así me dejan en paz...
De todos modos también me he tranquilizado con los años, he dejado de discutir, con mi marido llevo 20 años, tengo dos hijos de 18 y 14, la nena tiene discapacidad y creo que no lo hago mal del todo...
Hay veces que trabajo y soy totalmente funcional, los últimos años trabajo con personas y tengo mucha empatía, he estudiado los últimos 8 años y aunque me daban bajones los he sacado adelante, no soy muy inteligente pero tampoco tonta... soy normal...
Tengo motivos para no estar bien, crisis, no voy de vacaciones, la nena con sus dificultades, el hijo con sus problemas de la edad, un marido demasiado pasivo que no tiene mucha iniciativa pero es buenísima persona....
Al principio de mi relación si sacaba ira a pasear, tuve cinco lavados de estómago porque quería desaparecer pero por hacerme daño yo, nunca he querido hacer daño a nadie, sufro mucho, no soy feliz, cuando lo soy me da mucho miedo porque si caigo caigo mucho y me freno, soy autodestructiva y en fin... un poco resumen de mi vida....
Mi niñez fue difícil, un padre autoritario, gritos... en cierto modo lo normal en aquella época, los profesionales siempre me dicen que lo mío es trauma infantil, que lo que un niño lo vive de una manera yo lo viví de otra y me marcó...
Nunca he sufrido abusos, golpes, desahucios.. así que a veces me siento culpable por sentirme mal cuando tengo lo que cualquier persona sin problemas... un techo, una familia, amigos, trabajo a veces, vida social tirando a normal, estudios...
Alexander, muy buena la frase, creo que es oportuna para la situación, me he reído. saludos
Alexander dijo:
Elisa D, he leído tu testimonio y veo que has analizado mucho la relación con este hombre; que más que una relación fue un encontronazo.
He recordado el final de Annie Hall de Woody Allen: “…y recordé aquel viejo chiste, aquel del tipo que va al psiquiatra y le dice: Doctor, mi hermano está loco, cree que es una gallina. Y el doctor responde: ¿Pues por qué no lo mete en un manicomio? Y el tipo le dice: Lo haría, pero necesito los huevos. Pues, eso más o menos es lo que pienso sobre las relaciones humanas, saben, son totalmente irracionales y locas y absurdas, pero supongo que continuamos manteniéndolas porque la mayoría necesitamos los huevos."
Hola Elisa, has hecho un anàlisis de lo que fue tu relaciòn, y sobretodo entendiste como funcionas tù, como funciona el otro...y como esa cosa en comùn te enseño de tì y de èl.
Yo te podrìa describir mi historia y tu texto se quedarìa corto en pàginas, jaja..sobretodo porque no es lo mismo tener un encuentro vital de una relaciòn en el tiempo con un novio tlp, un compañero de trabajo, una hermana, etc
Te imaginas el vìnculo materno-filial?, osea, me explico, es tu madre, no, no es la madre de la vecina es Tu Madre,, no vas por ahì cambiando de madre como puedes cambiar de pareja, es tu madre, es la primera figura de apego.
Lo primero es que por condicionamiento cumples con sus rasgos genuinamente dolorosos . Lo segundo es que te tienes que conocer y reconocer en esos rasgos para desprogramarte. Te tienes que convertir en un infiltrado,en tu propia mente jjaja y pasarlas canuta¡¡ supercanuta¡ requetecanutas¡...pero ese viaje se emprende, porque deseas de todo corazòn tener paz, y el camino debe ser amoroso, si no no es el camino ...una odisea¡¡ jaja..
Hola Aran: Yo en ningùn momento pienso respecto a una madre asì en tèrminos de maldad, por dios¡ ..antes al contrario, son heroinas en cierto sentido, puesto que a pesar de las limitaciones propias, hacen lo mejor que saben...y eso siempre es de reconocer..anda que no¡nunca dejarè de valorar todos sus esfuerzos por dar lo mejor de sì, a pesar d las tendencias ....lo peor que se lleva es sentirte frustrada por sus vaivenes emocionales de alto grado, por sus impredecibilidad, su sufrimiento , en una palabra...eso nos cala hasta la mèdula.
Tu tambien eres otra heroina Aran, chapeau por tì¡¡ mucho ànimo en tu vida con tus hijos y circunstancias.
aran dijo:
y en cambio no me veo mala madre, no he faltado el respeto a mis hijos, no les he pegado, no me hace falta gritar, soy de dialogar con el mayor, con la hija es más difícil porque es tener una hija que no habla más que palabras sueltas y eso le crea una forma de comunicarse complicada... tiene discapacidad cognitiva y cada vez le cuesta más andar ya que se desestabiliza con las dificultades que esto tiene en su desarrollo...
En mi caso no puedo asegurarlo al cien por cien pero pondría la mano en el fuego que mi padre padecía de este trastorno, yo tenía claro que no quería ser igual que el y he trabajado duro....
Hola, Elisa d:
Muchas gracias por tu aportación. Me he sentido totalmente identificada con tu historia.
También creo que hay algo en nosotros, las parejas de TLP, que hace que los atraigamos. Mi anterior pareja no sé si tenía algún trastorno mental, pero consumía alcohol y drogas y fumaba, al igual que mi pareja con TLP. No sé si de tanto leer, pero también me ha pasado pensar que tengo TLP. Baja autoestima, poner a la gente como perfecta y cuando veía cosas que no me gustaban en ellas se me caían del pedestal donde los había puesto, estar muy pendiente del teléfono, sentirme ignorada si estábamos varias amigas juntas, sumisión en la pareja y falta de empatía. La verdad es que la relación con mi pareja con TLP me ha ayudado, además de la terapia, a cambiar casi todas estas características tóxicas, excepto, la que tú nunca has tenido, agresividad verbal. Sobre todo, como también te ha pasado, a mejorar la autoestima y el amor propio.
Al cabo de unos meses de estar con mi pareja con TLP ya me pareció que vivía en una realidad paralela. Todo lo tergiversaba y daba la vuelta. Tampoco le salía besar o abrazar de manera natural a sus hijos. Una vez me dijo que no entendía por qué la gente se enfadaba con él; no era consciente qué decía o hacía para enfadar a los de su alrededor. Su mirada, inicialmente, era penetrante e intensa, tanto que me resultaba incómodo cuando me miraba de esa manera. Su cambio súbito de comportamiento, como bien describes, fue un shock. Los niveles de ansiedad y ataques de pánico, que nunca había sufrido antes, eran tales que no dormí en semanas y parecía un zombi durante el día.
Muy cierto cuando dices que ellos no te llegan a conocer. Yo sabía mucho de mi pareja, sus anteriores relaciones, muchas de sus anécdotas, lo cuál todo te da pistas si escuchas bien. Pero él, él no sabía casi nada de mí, no preguntaba. Incluso cuando conoció a mi familia y parte de mis amigos fue bastante maleducado y rudo en general.
Mi marido no era mujeriego, o por lo menos no lo parecía. Sí se aislaba todos los días durante una o dos horas (lo encontré encerrado con llave en el garaje varias veces). Creo que lo hacía para poder fumar, beber y tomar marihuana sin que lo viese, además de para sobrellevar la pérdida de contacto con sus hijos. También estaba paranoico y era desconfiado.
Efectivamente, imposible dialogar. Todo es culpa nuestra y solo cuenta lo que siente ellos. Había que estar pendiente de él, de lo que quería y sentía, pero no al revés.
Otra cosa que comparto en lo que dices es la incertidumbre al estar con él. Tenía muchos planes e ideas, pero no hacía nada para llevarlas a cabo. No tenía trabajo fijo, se mudó a otro estado (vivíamos en USA) para estar cerca de sus hijos y yo cuando acabé mi contrato de trabajo me mudé con él, gastaba dinero sin control y tuve que hacerme cargo de bastantes gastos suyos. También cambiaba de ideas cada poco tiempo.
Tu post es de hace años así que espero que te esté yendo bien y hayas podido perdonar y recuperarte.
Saludos.
Bienvenid@ a
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