Psicoconsulta: sobre la ira

La ira se define como un enfado muy violento, en que se pierde el dominio sobre sí mismo y se cometen conductas violentas verbales o físicas .

Cuando la persona responde con ira se torna muy tenso y agitado, tiene sensaciones raras, no habituales, e incluso puede llegar a perder, al menos en parte (o casi completamente) el control de su comportamiento. Los pensamientos se reducen a querer agredir a la persona o personas que, al parecer, han sido los causantes o responsables de la situación considerada como "injusta".

Cuando se está "dominado por la ira" o simplemente bajo los efectos de la ira, la forma de comportarse sirve para señalar a los demás que se está bajo ese estado: se pone rojo, se enseñan los dientes, chilla, grita, insulta, intenta agredir o agrede, etc. Se podrían describir muchas conductas más que cualquier persona puede identificar como conductas debidas a, o producidas por, la "ira".

CULPA Y FRUSTRACION
El recuerdo posterior de estas situaciones suele ser poco positivo: "No debería haber dicho lo que dije", "en realidad no siento lo que dije o hice, fue un momento de ofuscación..”. Lo que con frecuencia provoca una cierta sensación de malestar consigo mismo por haber perdido, al menos hasta cierto punto, el control. Las personas aquejadas de cólera crónica pueden prometer no volver a comportarse de esa manera, a no volver a perder el control, sin embargo, fracasan en su intento.

No siempre la ira es mala o desaconsejable. La ira es una emoción más, no hay que avergonzarse de experimentarla en algunas ocasiones. Lo que debe hacer es aceptar su ira, reconocer que se siente airado. La ira es inadecuada cuando no le ayuda en la situación en que se encuentra, cuando sólo sirve para empeorar la situación. Pero la ira tiene también una importante función social y personal, que puede hacerla útil si se aprovecha de forma adecuada.

¿CUANDO LA IRA SE CONVIERTE EN UN PROBLEMA?

La ira, puede ser un problema, en especial cuando:

• Es muy frecuente, intensa o duradera.
• Facilita realizar conducta poco útiles (en especial conducta agresivas).
• Interfiere y desorganiza su ritmo de vida habitual.
• Interfiere o dificulta sus relaciones sociales.
• Le provoca un estado de malestar emocional relativamente mantenido.

CÓMO CONTROLAR LA IRA

• Reconozca la fuente de su ira, sus ideas "irracionales", que hacen que usted interprete la situación como injusta. Muchas veces nuestras conclusiones son erradas y lo único que expresan son exigencias poco realistas, tanto respecto al comportamiento de los demás como al propio. Intente modificar esas creencias sustituyéndolas por otras más racionales.
• Relájese, apenas usted sienta que está iniciando una reacción de cólera, trate de respirar lenta y profundamente, esto le servirá para reducir los niveles de tensión. Puede acompañarlo de  expresiones como: "calma...", "tranquilízate".
• Puede desarrollar una serie de verbalizaciones como: "debo tomar las cosas con calma...","debo mantenerme en el terreno de la tranqulidad...", "si me controlo tendré la mejor respuesta frente a la situación...". "Me debo abocar a resolver el problema, requiero calma...", "lo domino, lo controlo...", "¡qué bien!, lo he conseguido...", etc.
• Aprenda a expresarse con calma, desarrolle una conducta asertiva, reconozca su derecho a expresar sus ideas, emociones y sentimientos de manera libre, siempre y cuando no genere agresiones hacia los demás.
• Reconoza el derecho de los demás a ser diferentes a usted, a hacer las cosas, a pensar y sentir distinto.
• Lleve una vida sana, relajada, con tiempos para el desarrollo de actividades deportivas o espirituales, si usted se ve sometido a estrés no será extraño responder con irritabilidad e ira.
• Deje de lado el alcohol, las drogas.